SEO – Aparecer en los primeros puestos de Google
SEO (Search Engine Optimization) es una estrategia de marketing que sirve para optimizar las páginas web para los buscadores. Los principales motores de búsqueda son Google, Yahoo y Bing, siendo el primero el más usado en España. Es un proceso natural y orgánico. Es decir, para aparecer en los primeros puestos no hay que pagar campañas de anuncios. Eso tampoco quiere decir que no lleve aparejado un coste económico ni de tiempo. El SEO tiene un gran trabajo detrás para conseguir el principal objetivo, aparecer en los primeros puestos.
La estrategia SEO, para obtener los mejores resultados, siempre debe tener en cuenta el complejo algoritmo utilizado por los buscadores y que sienta las bases a la hora de realizar las tareas encaminadas a lograr los primeros puestos. De otra manera, el motor de búsqueda puede penalizar a la página web quitándola de los primeros puestos e incluso eliminándola de sus listados.
Este algoritmo depende de decenas de factores, cuya importancia va cambiando con el tiempo. Lo que no cambie es que Google quiere enseñar en sus resultados de búsqueda el contenido que vaya a interesar al usuario.
Un buen trabajo SEO debe constar de muchos aspectos como la correcta optimización del sitio web (implementación de metaetiquetas, arquitectura web, etc.), contenido de calidad y original o la consecución enlaces óptimos. Sin olvidarnos que siempre hay que hacer un buen estudio de las palabras clave a utilizar además de cuidar el diseño y la usabilidad de la web.
SEM – Conseguir visibilidad con los anuncios de Google
Si en el SEO el objetivo es lograr resultados orgánicos, en el SEM (Search Engine Marketing) se busca obtener mayor visibilidad mediante campañas de anuncios de pago. Es decir, anunciar los productos o servicios de nuestra web en Google para lograr nuestros objetivos.
Pero, ¿cómo sabemos cuando un resultado es por una campaña de SEM y por SEO? Fácil, cuando se realiza una búsqueda en Google los resultados que aparecen en la parte superior y en el lado derecho de la pantalla junto a la etiqueta amarilla ‘Anuncio’ forman parte de campañas SEM. Esos resultados están ahí porque se ha pujado por una serie de palabras clave y se paga por conseguir clics e impresiones de pantalla.
Diferencias entre SEO y SEM
Visibilidad
SEO – La visibilidad es orgánica, y depende del algoritmo de Google considerando que tu contenido pueda resultar más interesante a los usuarios que el del resto de webs y competidores.
SEM – La visibilidad es pagada, y funciona mediante un sistema de pujas que cambia constantemente. Mediante una inversión (que depende de ti), podrás asegurarte de que tu contenido sea una de las primeras cosas que el usuario vea al hacer una búsqueda.
Posición de tu contenido
SEO – Aparecer entre los primeros resultados no está garantizado, porque no solo depende de ti. Eso sí, una de las mayores ventajas del SEO es que, una vez se logre, no hay demasiada fluctuación, a no ser que Google implemente una gran actualización en su algoritmo.
SEM – Depende de la inversión, pero mediante el SEM puedes colocar tu contenido en los mejores lugares de la página de resultados para que el usuario lo vea.
Resultados
SEO – De nuevo, depende de muchísimos factores. En general, los resultados de una estrategia SEO se ven a medio o largo plazo, cuando Google ha valorado el trabajo continuo y cómo los usuarios interactúan con tu web.
SEM – Son inmediatos una vez comienza la inversión.
Coste
SEO – Se paga el trabajo de optimización, desarrollado por los profesionales. Estos tienen que tener conocimientos de la estructura web, el algoritmo de Google y de generación de contenidos que ayuden a posicionar la página. Es un gasto fijo y continuo, que depende de cuántos contenidos se generen.
SEM – En esta ocasión, no solo se paga a un profesional que se encargue de gestionar y optimizar las campañas. También se invierte una cantidad de dinero para que tu contenido llegue a usuarios interesados en ello. Mientras continúe la inversión, las campañas SEM también lo harán. En SEO no pagas por los usuarios que entren en tu página, pero con el SEM sí.
Contenido
SEO – Tiene que ser de calidad, pero también en cantidad. Así se podrán tener más posibilidades de posicionar y de ayudar a los usuarios. Y recuerda que si haces cosas poco honestas, copiar textos o utilizar demasiadas palabras clave, Google te penalizará.
SEM – Tiene que incitar a la acción, al clic. Para ello, los profesionales prueban decenas de combinaciones de textos para comprobar cuál es el que mejor funciona. También es muy importante la página a la que se dirija, y que tenga relación con el texto y lo que el usuario quiere.
¿Qué es mejor, SEO o SEM?
El SEO requiere un trabajo que ofrece resultados a medio plazo, pero que se mantendrán en el tiempo. Mientras que el SEM, permite conseguir visibilidad en muy poco tiempo, con un inconveniente, esos resultados desaparecerán de los primeros puestos en el momento que se deje de pagar la campaña de anuncios.
Lo más recomendable es diseñar una estrategia en la que se combinen las dos opciones. Realizar una serie de campañas SEM mientras el trabajo SEO va logrando objetivos y resultados, es una buena estrategia para comenzar a tener visibilidad en Google de los productos y servicios de nuestra web. Está comprobado que tener resultados de Adwords y orgánicos proporcionan un mayor número de clicks, además de reforzar el branding de nuestra marca.